Phil Collins negro

Mucha gente se pregunta que es lo que le hace "tick" a un tipo que lo tiene todo. OK, sabemos que hay cosas que el dinero no puede comprar, que la felicidad no está en los billetes, y un montón de otras cuestiones. Pero Phil Collins es un señor grande ya, que ha tenido mucha agua bajo el puente, y que debe tener resuelto el tema del dinero como para poder dedicarse a todas esas cosas que decimos que son importantes y el dinero no puede comprar. Y sin embargo, graba un nuevo disco solista. ¿Hacía falta? Habría que ver si a él le hacía falta: el mundo ya se desintoxicó de Phil Collins hace rato y no quiere una recaída.

Placer musical no le ha faltado a Phil Collins que ha sido baterista, cantante y compositor de una de las mejores bandas de la historia del rock: Genesis. Que además fue confirmado por su carrera solista, la que lo convirtió en una celebridad, cosa que le permitió acceder a quien quisiera y tocar con quien le diera la gana. Y como si eso fuera poco, cuando Phil Collins quería tocar fusión, tenía al grupo Brand X.

Pero parece que no le alcanzara, y saca un disco dedicado a temas de Motown. Lo cual no es curioso si recordamos que en su segundo álbum hizo "You can`t hurry love" con notable éxito. Para completar el cuadro, hay que recordar que Phil Collins tiene una enfermedad o un desgaste oseo que le impide agarrar los palillos de la batería. Sin embargo, en "Going Back", muestra la foto de como se hizo "pegar" los palillos a su mano.

Hay que tener un amor muy grande, por la música y por Motown para hacer semejante esfuerzo, por parte de una persona que bien podría no hacerlo. Es eso lo que trasunta "Going back", la dicha en movimiento para un baterista y un cantante que ama el soul. Lo curioso es que Phil Collins no busca darle "su toque" sino que se esfuerza desde la batería en replicar el sonido y el estilo Motown, que se ve reforzado por la elección de músicos históricos de la legendaria etiqueta. Uno se da cuenta que el tipo disfruta y ama eso cuando lo escucha cantar, con una pasión delicada que no interfiere en el paso de las canciones, elegidas además con un gusto exquisito.

"Going back" es un disco que redime a Phil Collins de la saturación a la que nos sometió en los 80 con temas tan espantosos como "Sussudio". Muestra que todavía le importa la música y que sabe donde están sus raíces. Deja en evidencia que el hombre disfruta en serio. Como me dijo otro músico: "cantar estas canciones me hace olvidar que soy yo". Y lo que se siente es que aquí Phil Collins se olvida de quien es, y se parece mucho más al adolescente de la tapa, con pelo rubio y flequillo, jugando a ser una estrella de Motown.